MI VOLAR



MI VOLAR…

Vuela mi corazón, paloma al cielo,
liberando grilletes, sin castigo;
el conjuro del aire, su testigo
y el manto de las nubes su consuelo.


El estambre celeste de mi anhelo
se quedará contigo,
mi dulce enamorado y fiel amigo,
un ángel de ternura a ras del suelo.

A mis alas de azules armonías
sostienen las eternas poesías,
un destello de luz sobre las glosas
y silvestres efluvios campesinos.

                    Un sol alumbrará nuestros destinos
                   por las sendas brillantes y aromosas…

                                         María Bote




MIS CANTARES

Cantan las flores
a la luz del poniente
y a los albores.
Yo canto a mis amores
con voz ardiente.

Y la espuma del mar
recoge mi cantar.

Por la mañana
oigo el sonar del río
y a la campana.
No deja mi ventana
pasar al frío.

Luz del amanecer

dibuja tu alicer.



Dame la hora
del reloj de tus labios,
sin más demora.
Me llegan con la aurora
tus besos sabios.

Aromas de alelí,
un ramo carmesí.

En primavera
piden los surcos rojos
la sementera
y alumbran la ribera
tus lindos ojos.

Mis cantares de amor
se mecen en la flor.











                          Luna ideal,
                   huye de la alborada.
Luz de metal
tienen tu delantal
y tu mirada.

Con hilos de tisú
bordé mi canesú

Por los caminos
he de sembrar rosales
sin los espinos.
Mis pasos peregrinos
por los anales.

Crisol de fantasías,
tus noches y mis días.


Con tus desvelos,
yo lavaré en la fuente
blancos pañuelos
y se ahogarán tus celos
en la corriente.

En la luz de tus ojos
se miran mis antojos.


María Bote

ME CANSÉ...



ME CANSÉ DE ESPERAR

Ya me cansé de esperar
las flores de las delicias
en tu pretil de malicias.
Sigues negándome aprecios,
de sus candores las mieles.
La puerta de la ternura
se cerró por mi clausura
ante tus antojos necios.

Ya me robaste las risas
y el vergel de las infancias.
Con cardumen de arrogancias,
tu vil simiente dio fruto.
Mi pena te ocultaré;
haces burla de mi llanto,
así, mi llorar es canto
con  amargura de luto.

Ya me voy hacia el olvido
conservando en mi pañuelo
los aromas del anhelo.
Por los mares, sin fervor,
me fundiré en las mareas
yendo contra la corriente.
Herido el pulso, doliente,
por tu buril rompedor.
                                         
                                           María Bote

OTOÑO DE LA VIDA




OTOÑO DE LA VIDA
(Soneto en asonante)

El árbol se estremece por las hojas
caídas de su esencia y su regazo,
y recoge la luz de los ocasos
en los días que gimen y se acortan.

También mi corazón, de ausencias llora
en pretiles de ocres y dorados.
Otoño de la vida desechando
raíces de simientes que me abonan.

En la tarde se escucha la campana,
riega con su tañer y su armonía
la ruda sequedad de los caminos.

El tiempo y su cadencia se derraman
sobre el tapiz gastado de la vida,
añorantes  del sol en su retiro.

María Bote

HAIKUS DE LAS ESTACIONES



HAIKUS DE LAS ESTACIONES

SUELO DE HOJAS,
OCTUBRE DE PISADAS,
LLORAN LOS OCRES.

BLANCA LA NIEVE.
EN LAS NOCHES DE ENERO
REINA LA LUNA.

CANTAN LOS RÍOS
EN TARDES ABRILEÑAS,
BAILA LA FLOR.

SOLES DE JULIO
EN SUS CARROS DE FUEGO.
LUZ SIN FINAL.

María Bote
8 – 11 - 2013
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