LUNA DE OTOÑO
LUNA DE OTOÑO
Luna, entre la hojarasca
de otoño en duermevela;
el doliente racimo
su desgarro lamenta.
El sol empequeñece
envuelto en su tibieza
y la mañana viste
de rocío a la hierba.
El árbol se desnuda
y virgen se nos muestra.
El amor verde y dulce
amargo se recuerda.
Los ocres de la tarde,
la lluvia y sus tristezas
anegan a mi alma
de delirios y ausencias.
¡Oh tú, que me dejaste
prendido entre las cejas,
un broche de suspiros,
un cielo sin estrellas.
Un lagar de añoranzas
en tu pecho hará prenda
y en tu luna de hojas
sin quererlo, me llevas.
Ya se oscurece el tiempo,
la flor yace en la tierra
y gimen los cristales
con su llanto de perlas.
Eres ancestro, luna,
al presidir las penas
y las melancolías,
cuando el otoño llega.
María Bote.
Luna, entre la hojarasca
de otoño en duermevela;
el doliente racimo
su desgarro lamenta.
El sol empequeñece
envuelto en su tibieza
y la mañana viste
de rocío a la hierba.
El árbol se desnuda
y virgen se nos muestra.
El amor verde y dulce
amargo se recuerda.
Los ocres de la tarde,
la lluvia y sus tristezas
anegan a mi alma
de delirios y ausencias.
¡Oh tú, que me dejaste
prendido entre las cejas,
un broche de suspiros,
un cielo sin estrellas.
Un lagar de añoranzas
en tu pecho hará prenda
y en tu luna de hojas
sin quererlo, me llevas.
Ya se oscurece el tiempo,
la flor yace en la tierra
y gimen los cristales
con su llanto de perlas.
Eres ancestro, luna,
al presidir las penas
y las melancolías,
cuando el otoño llega.
María Bote.